Este fin de semana salí con mi esposa a hacer un par de diligencias en un Centro Comercial y aprovechamos para caminar un poco y tomarnos un café.

En ese caminar encontramos que había una demostración de vehículos de una agencia en particular (voy a reservarme el nombre); el caso es que he venido intencionalmente visitando sucursales de esta agencia para analizar la atención de los vendedores mientras veo mi próximo vehículo y hoy no fue la excepción.

Durante tres veces pasamos a ver los vehículos en demostración; me subí en el de mi interés, abrí puertas e incluso abrí la cajuela y estuvimos varios minutos apreciándolo; sin embargo, en ninguna de las tres ocasiones se nos acercó un vendedor a ayudarnos o al menos consultarnos si teníamos alguna duda o requeríamos de información.

Esta no es la primera vez que noto este comportamiento; de hecho lo noto constantemente en restaurantes, tiendas de ropa y otros lugares.

Me impresiona ver las infinitas oportunidades que se dejan pasar simplemente porque la mayoría de estos vendedores aún no comprenden que SERVIR es el nuevo vender.

Digo que la mayoría porque en mi investigación personal si he encontrado algunos vendedores que sin ser manipuladores han logrado demostrar interés genuino en servirnos; de hecho tengo una historia de uno de ellos pero esa la compartiré luego.

Por lo pronto, el enfoque de mi mensaje es la importancia de cambiar el paradigma de las ventas por una sencilla pero importante razón: TODOS SOMOS VENDEDORES.

Cualquiera que sea tu trabajo, no importa a que te dediques, siempre estás vendiendo. Si estás buscando empleo, en las entrevistas estás vendiendo tu imagen y experiencia; si estás buscando una relación también es un proceso de venta. Todos ellos en un contexto diferente pero venta al fin.

Hoy día el modelo de ventas ha evolucionado; sin embargo, la mayoría de las personas aún no se dan cuenta y muchos continúan relacionando la palabra “ventas” con “manipulación”.

No importa a que te dediques, te invito a considerar cuál es tu producto y después de ello, identifica de qué manera puedes servir a tu cliente de tal forma que en vez de “tener que venderle” permitas con tu servicio que él/ella quiera comprarte.

Hoy durante nuestra visita en la demostración de autos muchas personas veían los vehículos pero cada quien por su cuenta mientras los asesores esperaban a que alguien les buscara. Considerando que están ubicados en uno de los Centros Comerciales más concurridos y que un vehículo de esos se puede dejar reservado con tan sólo $500, me parece impresionante la cantidad de oportunidades que estaban dejando ir por no tomar su tiempo para servir a cada una de esas personas. No es la primera vez que me entero de que usualmente entre en juego el “juicio” que los vendedores hacen de acuerdo a ciertas características de las personas (su edad, su apariencia y hasta la cantidad de bolsas de tiendas que cargan) lo cual es una verdadera lástima porque claramente no saben cómo se CREA a un cliente y continúan esperando atraerlos con el mínimo esfuerzo.

Recordando que TODOS somos vendedores, deseo invitarte a SER intencional en SERVIRa las personas porque si lo haces te sorprenderás de los resultados que encontrarás en tu vida.

Si las ventas son de tu interés desde el punto de vista profesional, te recomiendo estudiar el modelo S.P.I.N. y si tienes consultas o deseas profundizar más sobre ese modelo, no dudes en contactarme y con gusto te ayudo. Este es el modelo que espero muy pronto estar impartiendo a todos los vendedores de esta famosa agencia misteriosa. (cuando lo haga les cuento) 😉

SERVIR es el nuevo vender

Hasta pronto!

Tu amigo y Coach, Minor Arias.